Invierno en el viñedo

Si bien con las bajas temperaturas solemos decir que la vides reposan, lo cierto es que en las viñas la actividad no se detiene.

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Es cierto que siempre que hablamos de un viñedo usamos imágenes de la vendimia o de los hileras cargadas de racimos y con su canopia bien tupida. Sin embargo, para hablar de un viñedo vemos destacar que los 365 días del año las labores se llevan adelante sin descanso. Eso si, cada estación demanda de trabajos diferentes. Por ejemplo, en invierno, con las temperaturas más bajas del año, es momento de preparar las vides para la próxima campaña y una de las labores más importantes es la poda.

La poda en invierno

Una vez finalizada la vendimia, generalmente en otoño, el viñedo queda por unas semanas en paz mientras las labores se concentran en la bodega. Por esos días, la temperatura comienza a disminuir y de este modo las plantas entran lentamente  en una etapa de reposo hasta que le frio también se instala en los suelos. Es entonces cuando las vides dejan de absorber nutrientes de los suelos y básicamente se alimentan de sus reservas. Esto coincide con el momento en que las hojas se tornan ocre hasta que caen al suelo, esto da cuenta que el reposo de las vides a comenzado hasta la primavera cuando retoman su actividad vegetativa.

Justo este momento es el indicado para realizar las podas y preparar las vides para la próxima vendimia, etapa que se comienza a contar desde la aparición de los primero brotes. Esta poda de invierno es esencial y sirve para cortar la madera que dio frutos en la vendimia anterior y asegura vigor en las nuevas yemas.

Por ejemplo, Alejandro Sejanovich, winemaker de Mil Suelos, explica, “para mí la poda es el inicio de los trabajos de la temporada y es una de las tareas más importantes. Te va a definir el vigor de la planta y sostener su arquitectura a lo largo del tiempo. Es un proceso que requiere conocimientos. Los sistemas de poda también significan sistemas de conducción y cada variedad tiene sus formas de reaccionar en relación a los sistemas de poda”.

Pero no es solo una cuestión de rendimientos o estética, también la poda cumple una función muy importante para la sanidad de las vides. “Uno de los problemas mundiales más importantes de la vid son las enfermedades de hongos en los troncos”, continua explicando Sejanovich. “La poda racional, con cuidado, significa cortar siempre madera nueva de no más de dos años, para que no ingresen patógenos que ataquen el tronco”.

Por todo esto, la poda de invierno es una de las actividades más importantes del año en el viñedo y solo es posible con equipos de trabajo calificado y son experiencia ya que deben saber elegir cuales son los sarmientos que se deben eliminar. Además, en casos como Mendoza, por ejemplo, estas labores se realizan con temperaturas muy bajas lo que da aun un valor más importante al esfuerzo realizado por los podadores.